Yo te nombraría beso,
blanco refugio de gaviotas
y de mi voz, que aún sin serlo
te seguiría como flecha
por los altos caminos
de la estrella.
Yo te elegiría de tinta,
de murmullo suave
meciendo las páginas
del viento
blanco refugio de gaviotas
y de mi voz, que aún sin serlo
te seguiría como flecha
por los altos caminos
de la estrella.
Yo te elegiría de tinta,
de murmullo suave
meciendo las páginas
del viento
Tus versos ya besan, vuelan montadas en las gaviotas.
ResponderEliminarYa lo sabes, eres una gran poetisa (no te niegues ese derecho).