... en qué bóvedas azules voy a guardarte de la alta oscuridad que me llama ...

domingo, 4 de julio de 2010

Ya lo sabes...


De mis besos, del amargo estupor autista
encadenado a mi verbo,
a mi soledad fruncida
del lápiz andariego de tu risa

brota la sangre paciente
de mi esperanza

emergen los cauces insólitos de las palabras,
dos misterios se pierden en la amplitud del ocaso

te he dicho siempre, ya lo sabes, te amo.

Cadáver de viento



Esta, mi palabra,
es cadáver de viento insepulto en las albas,
eco vencido en las cuerdas de un poema que no mira.

Esperarás azul, entre murmullos claros
la deriva oscilatoria de los días

aún eres tú de mi espera herida
la oscuridad protagonista
y estás aquí, escribiendo a mi diestra
el rumbo diacrónico de la melancolía

mis besos ciegos van a tu horizonte inmóvil
tú como nube, extiendes tus naves

un pájaro trastorna el silencio de tu diadema,
mi voz es ese espejo que no sueña.